PAPIÓN BABUINO
Papio es género de primates catarrinos de la familia Cercopithecidae conocidos vulgarmente como papiones o babuinos. No obstante, a veces se extiende esta denominación también a los miembros del género Theropithecus como el gelada e incluso al mandril. Pasando por alto estos dos monos, son los mayores monos del Viejo Mundo, los primates más corpulentos de hecho si se exceptúan los grandes simios y los simios menores.
El esquema de los babuinos es el de un primate de tamaño medio a grande, de hábitos terrestres que rara vez sube a los árboles, cuadrúpedo, de cabeza larga y fina, mandíbula fuerte dotada de largos caninos en el caso de los machos, manos con pulgar oponible y de gran maniobrabilidad, pelo más largo a los lados de la cara y sobre los hombros (nuevamente, en el caso de los machos) y cola arqueada y levantada hacia arriba, sin utilidad alguna ni apenas movilidad. Todas las especies presentan un fuerte dimorfismo sexual, en el que los machos son mucho más grandes y fuertes que las hembras. El comportamiento de éstos suele ser agresivo, pues en cualquier momento pueden entrar a una pelea por el motivo que sea. El color del pelaje, que varía según la especie, suele ser de color claro.
El hábitat varía según la especie, pero siempre es abierto, como pueden ser sabanas, semidesiertos o planicies rocosas. En la actualidad se encuentran principalmente en África, aunque también pueden encontrarse en la península arábiga y en algunos momentos del Plio-pleistoceno llegaron a extenderse haciaOriente Medio y Europa.
La dieta de estos animales es omnívora. Vagan en grupos a la búsqueda de cualquier cosa que les sirva de alimento: buscan insectos bajo las piedras, desentierran raíces y tubérculos, arrancan y manipulan con facilidad hojas y hierbas (gracias a sus versátiles pulgares) y cazan animales de tamaño pequeño o medio, comoroedores, liebres, antílopes pequeños o aves, a veces del tamaño de un flamenco o un avestruz joven. También consumen huevos que cogen de los nidos. Debido a su mal carácter, hay pocos carnívoros con el valor de acecharlos: los leones y los leopardos pueden cazar babuinos aislados de vez en cuando, pero en caso de que su víctima llegue a pedir ayuda pueden verse rodeados por la manada y ser muertos a mordiscos. Cuando se acercan a abrevarse a los cursos de agua, pueden verse amenazados por el cocodrilo del Nilo.
La longevidad es de unos 45 años, siendo la esperanza de vida al nacer 30 años, en la naturaleza, y cerca de 45 años, en cautividad.
Las manadas de babuinos varían entre los 5 y los 250 integrantes según la especie y la época del año, aunque normalmente rondan el medio centenar. Se observan diferencias importantes entre las costumbres del hamadríade del noreste de África (Papio hamadryas) y el resto de babuinos (agrupados bajo el nombre de "babuinos de sabana"). El hamadríade forma harenes pequeños compuestos por un macho adulto, otro joven no autorizado a reproducirse que probablemente le sucederá, varias hembras que se aparean con el macho dominante y las crías pequeñas de éstas, emigrando a otros grupos cuando llegan a la adolescencia para garantizar el intercambio genético. Los babuinos de sabana, por otra parte, tienen una estructura social más amplia, compleja y ordenada, aunque también fuertemente jerárquica. El poder está en manos de un macho adulto; le siguen los machos cercanamente emparentados con él, que cooperan para dirigir la marcha del grupo (a veces muy numeroso), situándose en la periferia del mismo, desde donde vigilan la posible aparición de depredadores; por debajo están los machos no emparentados, los jóvenes, las hembras y sus crías. Los individuos de sexo femenino, a su vez, se ordenan en una escala jerárquica de carácter matriarcal.